Recibo una visita

31 de octubre

Nada más levantarme, han llamado al timbre. ¡Eran mis tíos! Habían llamado a mi madre para pedir la dirección porque, ya que estaban de vacaciones allí, habían aprovechado para venir a ver cómo estaba y cosas por el estilo. Les presenté a mi familia y al final, se quedaron a desayunar. Antes de irse, me avisaron de la fiesta de Halloween, en la calle Jack número 12. Nada más llegar la información a mi cerebro, avisé a César y a los Rodrigos. Por la tarde fuimos a Harrods, en taxi, a ver que disfraz escogíamos y no era nada fácil ya que había infinidad (es un decir) de ellos. Rodrigo M se le cogió de muerte, Rodrigo V de Jack el destripador, César se cogió tres máscaras y una capa suelta -como siempre- y yo, de payaso fantasma.Te aseguro que los tres daban bastante miedo. Cada uno fue a su correspondiente casa a dejar el disfraz. Nos fuimos a dar un paseo por la calle del espectáculo. Más tarde fuimos al museo de cera, moló mucho, casi todo era de Halloween .Nada más salir fuimos al cine y al zoo de cosas extrañas y animales raros, como en el video de Internet, pero esto creételo, porque es real. En el cine vimos la película de No es un Halloween cualquiera 2, que era de risa. En el zoo ese vimos el animal más raro del mundo, que era como una mezcla de ardilla y de topo. Por la noche fuimos a la fiesta. Todo estaba decorado para el ambiente y daba la impresión de que era una casa encantada. Yo me presenté al concurso de disfraces y fíjate por dónde gané, pero no muy lejos de César con su multi disfraz. Yo tenía setecientos cuarenta y cuatro puntos y César quedó con setecientos veinticuatro. Y el premio eran cien libras, alucinante, ¿verdad? No me marché a casa hasta las once porque me quedé un rato más con el anfitrión. Llegué a casa y lo que hice fue irme a la cama porque estaba demasiado cansado para ver la tele.
¡Feliz Halloween!
(SERGIO CARRERAS)